EL ALCOHOLÍMETRO Y SUS PERIPECIAS

Qué triste es ver el nivel de respeto que la ciudadanía siente por la policía capitalina, y nótese que dije capitalina.
Una "señor" con la química corporal modificada, - hasta la madre de no sé qué-, insulta, manotea, pendejea y denosta a un policía -o a tres es lo mismo-.
Se sube a su vehículo y se retira triunfante, buen ejemplo para todos aquellos que han sido detenidos y que serán detenidos para la revisión del alcoholímetro.
La consigna será; “ponte al pedo, gritonea, amenaza, insulta. Si puedes amaga con golpear y después te retiras mentando madres”.
Eso hubiera hecho fabiruchis, o el político Jesús Silva-Herzog Flores o hasta yo, que tuve que pasar un “sabadazo” en el torito tragando una miserable “guajolota” –torta de tamal- y un café.
No tramité mi amparo pues mi asunto ocurrió durante los primero días del dicho alcoholímetro, pero ahora se la pelan, a mi ya no me apandan.
En fin, señor Mondragón sigue con su actitud de mosca, -pánico a morir de un periodicazo-.
Sr. Mondragón que hubiera pasado si Azalia le gritonea a usted? Usted la dejaría ir o se comportaría como un digno policía UNIFORMADO, como un hombre civilizado o simplemente como un hombre digo que cumple con su trabajo?
Y qué pasaría si sus elemento dejan ir a la pinche suripanta, aprendiz de verdulera - y que me perdonen las expendedoras de verduras- si después de que se va con su “salida triunfal” la obscura y verdosa mujercita plancha a un cristiano?
Usted no se la acaba, ya no le tenga miedo a los derechos humanos que son para muchos un pretexto para hacer lo que se les da la regalada gana.
A que hermosos tiempos aquellos de Téllez Girón y Ramírez - jajajajaja es broma es broma-
L a única manera de combatir los derechos humanos es aplicando la ley.
Pendejo o pendeja que se resistan a cumplir la ley, aplíqueles todo el peso de la ley y en ella ampárense.
Por lo que veo usted no sabe hacer su chamba y disculpe pero ya me encabrone.
La ciudad de México es un monstro gigantesco, en el cuál los derechos de los demás, nos los pasamos por el arco del triunfo.
Ante esa situación, ponga cámaras en las patrullas, adecuen el reglamento, y estipulen que el que se comporte agresivo, será tratado sin cortesías, y si agreden a un “uniformado”, será tomado como una agresión.
Pues como diría mi adorada doña “Chiuy”;
“No hay borracho que trague lumbre”
Difúndanlo hasta en las envolturas de las papas fritas y ya verán como esos pinches nacos prepotentes se acabaron.
Creo que eso del big brother si dejó secuelas en algunos participantes, pues no pudieron “regresar y siguen en el viaje”.
Suerte y ahí estamos
POr cierto si "no sabes leer" aca les dejo este link